

Los mitos son la arquitectura del pensamiento, una forma de ordenar lo incomprensible. En Colombia, cada pueblo ha trazado su propio mapa del mundo a través de relatos que explican el origen, el caos, la muerte y la transformación. Estas historias siguen operando en el lenguaje, en los gestos, en la manera en que entendemos el tiempo y la naturaleza. Fragmentos de pensamiento que aún respiran, que aún inquietan.
El amazonas y su mitología
Los mitos nacen como ríos que entrelazan el tiempo y la selva. En la amazonía el mundo se transforma: los gigantes caminan entre los árboles, el Sol y la Luna bailan en la noche infinita, y bestias míticas vigilan los secretos del bosque. Yepá, Luna o el temible Fïzido Jïzuma nos enseñan sobre la armonía. Son historias de transformación y resistencia, de rituales que evocan el poder de la naturaleza.
Los Andoques
La selva es un murmullo de voces antiguas, un eco de tiempos que no tienen prisa. La Canoa-de-Piedra surca la espesura de lo invisible, mientras los fantasmas se esconden en el aliento del viento. El Sol y la Luna aún cuentan su danza en las hojas, en la piel de los árboles, en el pulso de la selva que respira.